Existen varias recomendaciones para darle un mejor uso y gastar menos combustible.
El aire acondicionado es una parte fundamental del auto, pero hay momentos en el que empieza a fallar o a oler muy mal.
Por ello es recomendable hacerle mantenimiento cada 6 meses, y puedes hacerlo tu mismo limpiando el radiador, si tienes accesibilidad a él.
¿Por qué el radiador?
Bueno, resulta que el aire que sale del climatizador pasa por el radiador, es por esto que de vez en cuando es bueno echarle un vistazo, ya que puede estar cubierto de insectos y suciedad, lo que puede perjudicar otras partes del auto.
Lo que tienes es que utilizar agua tibia, después ábrelo para que compruebes el nivel del líquido refrigerante, los conductos, mangueras, y chequees que las correas están bien.
Y aunque esta limpieza es una manera preventiva y muy efectiva de evitar problemas con el aire acondicionado, aquí detallaremos ciertas recomendaciones para los problemas más comunes:
No enfría
Si al prender el aire no enfría como debe ser, coloca un termómetro por una de las salidas de aire, esperas 10 minutos, y si en ese tiempo marca la misma temperatura que ya tenías previamente, debe faltarle fuerza.
En este caso, podemos suponer que presentas una falla en compresor, o que uno de los filtros de la cabina está obstruido por la suciedad.
Mal olor
Si al encender el aire empieza a oler mal, a pesar de que hayas cambiado el filtro, debe ser porque durante el tiempo que estuvo sin uso se hayan proliferado hongos o bacterias en los conductos.
Así que cuando cambies el filtro inyecta aerosol fungicida en los conductos del aire, luego colócalos en recirculación con las ventanas cerradas por 10 minutos, así eliminarás el mal olor que desprendía el aire acondicionado.
Temperatura
No coloques el aire en menos de 22 grados °C, ya que al hacerlo elevas el consumo de combustible hasta en un 20%.
Revisar el aire acondicionado
La revisión en el taller debe hacerse periódicamente, es recomendable cada año, para comprobar que el compresor, el evaporador y la válvula de expansión funcionen correctamente, y que se haga la recarga del gas.
Por último pero no menos importante, cuando ya haya alcanzado la temperatura deseada, puedes apagar el aire, y dar paso al aire proveniente de afuera, de esta manera gastarás menos combustible.
